11 de febrero de 202112:12 – LA NACION
Como cada 11 de febrero, hoy se celebra el Día de Nuestra Señora de Lourdes, patrona de los enfermos, aunque en esta oportunidad la veneración se hará de manera virtual, debido a la imposibilidad de los fieles para congregarse masivamente en los templos.
El contexto de pandemia modificó los hábitos de los creyentes que, para esta fecha, se acercaban a la parroquia más próxima para elevar un rezo o un pedido a la Virgen. Como patrona de los enfermos, la Virgen de Lourdes es una de las más invocadas para pedir su intercesión y una pronta recuperación a quienes sufren alguna enfermedad o a lo largo de la pandemia fueron contagiados de coronavirus.
En esta realidad de restricciones y cuidados preventivos, el Papa Francisco se dirigió a los enfermos de todo el mundo y les transmitió su apoyo y cercanía, a través de su cuenta personal de Twitter.
“Por intercesión de Nuestra Señora de Lourdes, patrona de los enfermos, pidamos al Señor que conceda la salud de alma y cuerpo a cuantos sufren a causa de alguna enfermedad y de la actual pandemia, y que fortalezca a quienes los asisten y acompañan en este tiempo de prueba”, señala el mensaje público de Su Santidad.
Además, el pontífice escribió: “En la Jornada del Enfermo brindemos una atención especial a las personas enfermas y a quienes cuidan de ellas. Pienso, en particular, en quienes sufren en todo el mundo los efectos de la pandemia del coronavirus. A todos, especialmente a los más pobres, les expreso mi cercanía”.
La historia de la Virgen de Lourdes
La veneración a la Virgen de Lourdes proviene de 18 apariciones de la Virgen María en la gruta de Massabielle, en las afueras de la población de Lourdes, en Francia, en el año 1858.
Allí la imagen mariana se presentaba ante Bernadette Soubirous, una adolescente y religiosa francesa que, luego de todas las apariciones, fue canonizada por la Iglesia en 1933.
En una de las apariciones, Soubirous contó que la Virgen le había indicado tomar agua y escarbar en la tierra. Luego de un tiempo, emergió un manantial del que brotan 100.000 litros diarios de forma continua hasta hoy.
Oración a la Virgen de Lourdes
¡Oh amabilísima Virgen de Lourdes,Madre de Dios y Madre nuestra!Llenos de aflicción y con lágrimas fluyendo de los ojos, acudimos en las horas amargas de la enfermedad a tu maternal corazón, para pedirte que derrames a manos llenas el tesoro de tu misericordia sobre nosotros.
Indignos somos por nuestros pecados de que nos escuches: pero acuérdate de que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a Ti haya sido abandonado. ¡Madre tierna! ¡Madre bondadosa! ¡Madre dulcísima!
Ya que Dios obra por tu mano curaciones innumerables en la Gruta prodigiosa de Lourdes, sanando tantas víctimas del dolor, guarda también una mirada de bendición para nuestro pobre enfermo…(dígase el nombre del enfermo/a). Alcánzale de tu Divino Hijo Jesucristo la deseada salud, si ha de ser para mayor gloria de Dios.
Pero mucho más, alcánzanos a todos el perdón de nuestros pecados, paciencia y resignación en los sufrimientos y sobre todo un amor grande y eterno a nuestro Dios, prisionero por nosotros en los Sagrarios. Amén. Virgen de Lourdes, ¡ruega por nosotros! Consuelo de los afligidos, ¡ruega por nosotros! Salud de los enfermos, ¡ruega por nosotros! Rezar tres Avemarías.